February 25, 2014 | Posted in: Uncategorized

Los comunistas, los cubanos, los jefes de este proceso llamado bolivariano son expertos en eso de sacarle las tripas a la gente. Lo hicieron en Cuba por años. Lo siguen haciendo en Cuba. Allá tienen todo bajo control, pero al comienzo machacaron dedos por montones, fusilaron, enjuiciaron y condenaron a media Cuba. La otra parte de la isla sencillamente fundó la república de Florida, tal vez lo que hubiese sido ahorita Cuba. Pero ganó el comunismo y su estilo matón. Y hediondo a pobreza.

¿Saben quién es el líder mundial que más habla de paz? Dejando a un lado a Mandela o al Papa, gente como Fidel Castro es la abanderada del doble discurso. Hablan de paz mientras le sacan las uñas con un alicate al que se atreva a contradecirlos. Es una de las movidas más importantes y reiteradas del comunismo. Son matones y malos por naturaleza, pero igualmente son los más pacifistas. Todo el mundo es asesino, menos ellos. Todo el mundo apela a la violencia, menos ellos. Todo el mundo es cruel, menos ellos que son casi como una oveja de pesebre. Pero la verdad se sabe muy rápido en estos tiempos.

A Maduro, quien no tenía fama de torturador o criminal, sino más bien de buena gente, de segundón tranquilo y como de arrimado, como esa gente que se pregunta constantemente cómo carrizo hizo para llegar al lugar privilegiado en el que se encuentra. Eso se decía de Maduro desde hace 15 años. Un muchacho con una formación básica, ni bachillero, pero anda en las alturas y bien metido en la pomada. Y así llega a presidente. Mejor todavía. Pero de la fama de militar matón, como efectivamente sí tenía Chávez, nada que ver. Muy lejos. Pero ya acabó con esa ventaja en imagen corporativa, muy útil especialmente en el exterior. Por eso Maduro anda coqueteando con Estados Unidos. Si intercambian embajadores, perfecto para Maduro. El imperio, su enemigo lo reconoce y relegitima con todo y el montón de denuncias de violación de Derechos Humanos que ha acumulado en apenas 15 días. Por eso le jala mecate a Rubén Blades, quien lo cuestiona por ser otro sátrapa hecho el tonto. Por eso deja atrás las medidas contra CNNE. Y además cuenta con la ayuda de unos expertos en crimen político como el G2 cubano y los hermanitos asesinos del Caribe, Raúl y Fidel Castro.

Para esta fecha la conflictividad alcanza 15 muertes, más de 550 detenciones, más de 150 heridos. Y cuentos de la cripta por montones. Desde violación anal con fusil hasta disparos a  quemarropa, desde ataques de brigadas de la muerte llamados colectivos hasta funcionarios gatillo alegre.

Maduro estrena nueva imagen. Ahora también entró en el grupo de los sátrapas y violadores de Derechos Humanos. Y entró por la puerta grande.

elidesr@gmail.com / Twitter: @ejrl

 

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De la tortura y la represión bolivariana , 3.8 out of 5 based on 6 ratings

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